domingo, 20 de febrero de 2011

Álex de la Iglesia y un discurso épico

Sin duda, esta pasada gala de los Goya se antojaba interesante por todo lo relacionado con la ley Sinde, y contra la cual ya se había posicionado Álex de la Iglesia, el hasta entonces presidente de la Academia. No obstante, desde su cuenta de Twitter (@alexdelaiglesia), había anunciado que no haría polémica en la gala.



Cosa que, evidente y afortunadamente, no cumplió. En un discurso de poco más de 6 minutos, sacó los colores a Icíar Bollaín, vicepresidenta de la Academia, y, por supuesto, a Ángeles González-Sinde -y seguramente, también a otros tantos cineastas-. Si algo ha caracterizado a De la Iglesia ha sido el carácter dialogante con todas las partes, incluyendo, por supuesto, a los internautas. Y tanto ha sido así que incluso cambió su postura respecto a la ley.

Porque es un hombre sensato. Podrá ser una mala noticia para el cine, pero internet ha traído una serie de cambios irreversibles a los que la industria cinematográfica -al igual que la discográfica, o la editorial en un futuro- tiene que hacer frente. El modo de responder a una nueva tecnología no es legislar, sino adaptarse.

Algo que no entienden. En un sistema muy turbio de subvenciones -el 85% de la financiación de Pa negre, desconocida película, rotunda ganadora de los Goya 2011, provenía de la Administración-, se empeñan en mantener los precios exageradamente altos, sin ofrecer alternativas de calidad al streaming al que la ley pretende hacer frente y, sin duda el problema más grave, sin ser capaces de producir un cine a la altura de lo que los espectadores esperan.

Afortunadamente, en internet siempre hay vías de escape. La sociedad de hoy ve más películas y series, escucha más música y lee más libros que nunca. Ellos sabrán que les conviene: ofrecer un servicio diferenciado o seguir intentando ponerle puertas al mar. De la Iglesia ya se ha dado cuenta. Las reglas han cambiado.

8 comentarios:

  1. Escribí otro comentario, pero me temo que algo raro sucedió y no llegó a guardarse... Como ya te dije en su día cuando me lo enseñaste, el discurso es brutal, Juan. Me encanta que haya gente con tanto coco en el mundo, y lo digo tanto por De la Iglesia como por ti. Para serte franco, tenía miedo de que cayerais en la trampa de hacer un blog sobre cine: el tema puede ser facilísimo o supercomplejo, pero creo que, con esta entrada, has logrado un post de auténtica calidad. Espero de verdad que el resto de tus compañeros sepa hacerlo igual de bien, porque me da que no ocurrirá lo mismo en el resto de grupos... En fin, buen trabajo, en serio, enhorabuena.

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  2. Bueno, como otro miembro del blog que soy, antes de nada quería agradecer a Nacho su comentario :) Y sí, intentaremos estar a la altura y no caer en esa trampa que mencionas jeje ;)

    Con respecto a la entrada, estoy totalmente de acuerdo contigo, Juan. He escuchado opiniones que lo tachan de haber sido demasiado "políticamente correcto", pero yo creo que ha sido más bien todo lo contrario. Con toda la diplomacia y educación que le caracterizan, y como tú bien señalas, ha conseguido sacarle los colores a más de uno, y eso no es ser demasiado correcto, eso es inteligente, y algo que dice mucho a su favor. Quizás de nosotros, como internautas, entendería que se esparase una reacción más subversiva, por decirlo de alguna manera. No obstante, desde su postura de director de la Academia, creo que hizo todo lo que estaba en su mano, y que todos los internautas, no solo amantes del cine, sino amantes de la cultura, le agradecemos :)

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  3. Si he de quedarme con una frase del discurso de Álex, ésa es: "No hay nada mejor que sentirse libre, creando". El discurso, sin duda, es fabuloso, al igual, que tu entrada. Estoy totalmente de acuerdo contigo en que no se puede "ponerle puertas al mar" y admiro la manera en que has sabido desgranar y analizar la situación, exponiendo lo que a ti -y a la gran mayoría de los ciudadanos españoles- nos parece más lícito y, sobre todo, más ventajoso tanto para la industria del cine, como para sus consumidores.

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  4. Gran discurso y muy buena entrada, Juan. No tengo nada más que decir, toda la razón para De La Iglesia.

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  5. Alex de la Iglesia ha dejado libre un trono deseado por muchos. Se oye con fuerza el nombre de Bigas Lunas ¿Qué opináis? Son muchas más las críticas que he leo hacía el que los halagos. Si en las elecciones del próximo 10 de abril finalmente es elegido, haga lo que haga y como lo haga su antecesor le ha dejado el listón alto.

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  6. Juan, tu entrada refleja perfectamente que no es tanto la cantidad de información sino la calidad, y he de decir que es muy buena, ya que has logrado resumir tanto el discurso de Álex de la Iglesia como las opiniones de gran parte de la sociedad, todo ello en un texto que no resulta excesivamente extenso.

    A mi modo de ver, Álex de la Iglesia se caracteriza tanto por su carácter dialogante como por la gran variedad de medios de los que dispone para transmitir su opinión de una manera políticamente correcta, pero dejándose notar. Su profesionalidad, seriedad y la forma en la que emplea sus palabras consiguen llegar al público.

    Finalmente, me gustaría concluir diciendo que me ha agradado mucho la forma en que has cerrado la entrada: “las reglas han cambiado” porque sí, lo han hecho.

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  7. Gracias por vuestros comentarios. Sin duda este es un tema muy importante: libertades y cultura están de por medio, dos aspectos fundamentales del ser humano (¡nada menos!).

    Sobre Bigas Luna, no sé: si su candidatura ha recibido el beneplácito de Sinde, cabe esperarse colaboracionismo. Soy escéptico, el tiempo dirá.

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